miércoles, 14 de diciembre de 2011

Panic Station (2011) No disparen!! Soy de su equipo!! jejeje...


Diseñador: David Ausloos (también hizo el arte)
Editora: White Goblin Games / Stronghold Games
Jugadores: 4 a 6 (mejor con 6)
Tiempo: 45 minutos
Tema: Terror / Ciencia Ficción
Mecánica: Cooperativo / Puntos de Acción / Movimiento por Área

Al dedicarnos casi exclusivamente a los eurojuegos, hemos optado por dejar de lado otras familias de juegos que existen, como los juegos abstractos, las simulaciones y los juegos temáticos (incluyendo los juegos de rol y los juegos de componentes coleccionables). Pero de tanto en tanto alguno de ellos se filtra en nuestro catálogo por sus características excepcionales. En esta oportunidad, hablaremos sobre un interesante juego temático que plantea una original vuelta de tuerca a la dinámica de los juegos cooperativos.

Panic Station es un juego del género survival-horror, donde los personajes intentan sobrevivir a un horroroso peligro que los acosa. Los jugadores representarán un equipo de comandos enviados a una base aislada a exterminar unos especimenes aliens invasores. Inicialmente, todos comienzan jugando en el mismo equipo, pero a medida que exploran la base, alguno de ellos será secretamente “infectado” por el alien, y su misión ahora consistirá en “infectar” a los demás. Los infectados por él también intentarán infectarán a los demás, hasta que todos los humanos sean eliminados, o los humanos logren destruir el nido del alien, escondido en algún lugar de la base.
Así que funciona una dinámica en la que los jugadores van a ir siendo eliminados de un equipo para incorporarse al otro, pero sin que nadie tenga la certeza de quién juega para quién. Este efecto de “infectar” a alguien es optativo y se realiza en secreto, únicamente entre los jugadores que se encuentran en el mismo cuarto. Así que las suspicacias aumentan cada vez más y más, en la medida en que dos personajes coinciden en un cuarto, se escuchan disparos y gritos, y luego salen ambos con rostro impávido como si nada hubiera sucedido. – “No pasa nada, pensé que era un alien! jaja” – “Yo también, qué cosas! jeje” – “Pero no es un alien! No...” – “Él tampoco! No...”

El tablero modular crea siempre un escenario distinto, las cartas utilizan sólo una simple iconografía

La diferencia de este tipo de juego temático con los eurojuegos, pasa por varios lados. La más notoria es que es más indicado para jugar con un grupo numeroso (6 jugadores). Pero también que las estrategias para alcanzar la victoria pasan más por las interacciones directas entre los jugadores (meta-gaming) que por el efecto mecánico de las reglas. Finalmente, que esas interacciones directas pueden generar un sinnúmero de posibles situaciones inusuales en manos de jugadores “creativos” y las reglas tienen que prever una forma para resolver cada una de esas situaciones.
Las ventajas de este diseño temático en particular, también son importantes de remarcar, ya que son éstas las que justifican su introducción en el catálogo. Principalmente, que la dinámica del juego aporta a una ambientación muy bien lograda, donde la astucia, la paranoia y la acción subrepticia generan mucha tensión e inmersión en la partida. Pero más importante, es que esa inmersión en la historia se realiza en un juego que se termina en una hora o menos y que no tiene ninguna dependencia del idioma (no utiliza ningún texto, sólo una simple iconografía).

Raven, el personaje que siempre muere primero, por ser parecido a Justin Bieber

En resumen, Panic Station aporta esa dosis de tanto en tanto requerida, que tienen esos diseños que incitan al conflicto directo y juegan con las sensaciones a interacciones a nivel personal. El hecho que las partidas sean relativamente cortas y vertiginosas, por lo general ayuda a que no surjan sentimientos negativos, si no más bien anécdotas vívidas, surgidas de una excelente ambientación de un nivel cinematográfico.
Si en su grupo de juego quieren hacer un recreo y pasar de producir, construir y comerciar, a engañarse, traicionarse y matarse a tiros entre ustedes (digo, en un juego, por supuesto!) esta es una alternativa muy recomendable.