Diseñador: Antoine Bauzá (7 Wonders, Ghost Stories, Takenoko, Tokaido)
Editora: ABACUSSPIELE
Jugadores: 2 a 5 (mejor con 4)
Tiempo: 25 minutos
Tema: Tradicional / Oriental
Mecánica: Secuencias / Deducción / Cooperativo
A mérito de su nominación como juego del año en Alemania (Spiel des Jahres) volvió a la mesa del Ficus Grup para refrescar impresiones. Un juego cooperativo donde sostenés tu mano de cartas al revés, de manera que todos puedan verlas menos vos. Corto, simple, original y entretenido (y encima barato y portátil!).
Cada jugador en ronda puede darle a otro un dato de sus cartas (cuales tienen cierto color / número) o bajar una carta (supuestamente) colocándola en pilas por color que tienen que formarse en orden creciente. Hay un elemento de tiempo, ya que cada turno se utiliza una carta y cuando se acaba el mazo el juego termina. Cuanto más cartas se hayan bajado correctamente la mesa, mayor será la puntuación final.
El juego es realmente abstracto (como un juego de cartas tradicionales) pero la dinámica es bastante piola y para nada demandante. Por ello, genera un clima relajado e interactivo, que no te hace sentir para nada la aridez de la ambientación. Adicionalmente, tiene unos interesantes detalles de diseño que muestran el genio de un creador que logra tanto a partir de algo tan simple.
La información imperfecta compensa el efecto del jugador-alfa, que quiera intentar dominar las decisiones y usualmente es un problema en los juegos cooperativos. Aquí no sucede, porque por más que tengas una buena solución de movimiento, siempre lo consultás por las dudas que haya una mejor combinación en tus cartas que no estás viendo.
Hay también un simpático elemento de "jugársela" (push-your-luck) para ahorrarse algunos turnos de pistas que genera algunos graciosos "picos de tensión", cuando hay grandes posibilidades que casi (ojo, casi) cualquier carta que juegues te sirve, pero tal vez hay justo una que no y no sabés cuál de todas es.
Pero en resumidas cuentas, las decisiones son bastante simples y fluidas luego de un corto intercambio de opiniones, así que se trata de un juego muy accesible y nada confrontativo, ideal para el grupo familiar o de jugadores casuales.
Un título muy recomendable para tener en la colección. Por la mínima inversión que supone, ofrece muchas oportunidades de salir a la mesa.
No se si ganará el premio Spiel des Jahres pues tal vez le juegue en contra ser un juego muy pequeño. Pero dejando de lado ese aspecto del juego "como producto comercial" que también pesa en el jurado alemán, sin duda como creación tiene unos méritos que rebalsan muchas veces el tamaño de su pequeña caja.